La Seguridad Social – Primera parte
Por Jonathan Chandía
Iturra
Pre Candidato a Constituyente distrito 19
Integrante del Colectivo Fuerza Común
Nuestro país a lo largo de su no tan extensa historia, ha tenido distintas administraciones con distintas ideologías y diversos proyectos en cuanto a la seguridad social. En esta materia no ha existido un solo modelo o una sola forma de enfrentarla, concordamos quizá aquí que siempre se ha hecho de forma deficiente y es uno de los temas fundamentales que llevo al despertar de Octubre y la rebelión social, las pensiones.
Saltándonos un poco en el tiempo, Recuerdo haber leído unos discursos de Frei Montalva y en 1968, el ex presidente expresa sobre la seguridad social lo siguiente y lo cito: ““Hay 2000 leyes sobre previsión social en Chile. Piensen ustedes lo que eso significa. Dos mil leyes previsionales, más los reglamentos, más los acuerdos de las cajas, es decir, una monstruosidad que va en aumento. En la ley de reajuste de 1966 se introdujeron 46 nuevas normativas previsionales. 44 en 1967 y 1.234 en el año 68. O sea que en sólo tres años a las 2000 leyes se han agregado casi 1300 nuevas disposiciones. Además en Chile hay 30 cajas de previsión y 70 servicios de bienestar en organismos complementarios de seguridad social”.
Análisis que no varía sustancialmente durante el mandato de la Unidad Popular, se impulsaron diversas reformas pero fueron rechazadas en el parlamento o llevadas al naciente Tribunal Constitucional.
Un dato no menor, lo entrega nuestra historia reciente y señala que en el año 1956 la escuela de economía de la UC firmo un convenio con la escuela de economía de la Universidad de Chicago, para formar allí los primeros cuadros en una nueva forma de ver la economía, el naciente neoliberalismo (que supone una superación del sistema liberal clásico de Adam Smith y David Ricardo, por Friedman, Stigler, Becker y otros).
Con dicho convenio estudiantes de las Universidad Católica y de Chile comenzaron con sus estudios y preparación, algunos de ellos se reunieron en un equipo para asesor la candidatura de don Jorge Alessandri. De sus reuniones y estudios, nace “El Ladrillo”, base fundamental del programa de gobierno propuesto por Alessandri que pierde con Allende en 1970 y que se retoma con fuerza luego del golpe militar de 1973.
Entre otros temas, “El Ladrillo”, se hace cargo de esta materia tan diversas que es la seguridad social. De lo primero que nos encontramos en aquel libro, es con una crítica al sistema previsional de aquel tiempo que señalaba: “que existe una crisis generalizada en el sistema de previsión social y lo definen como injusto, discriminatorio e ineficiente.” Frase que sin duda compartimos en cuanto al sistema de AFP en 2020.
El grupo de expertos economistas y todos los estudios que realizaron, concuerdan que el sistema de seguridad social existente al año 1968, se identifican en el, tres problemas principales: Su alto costo; La discriminación o injusticias del Sistema y la baja eficiencia del sistema que crea una discrepancia entre los fondos aportados y los beneficios recibidos.
Las últimas palabras, más que solo un cuestionamiento del sistema antiguo, son más bien palabras que incluso calzan perfecto con el sistema de cotización individual, e implementado por el hermano del presidente, José Piñera, quien desde su llegada al Ministerio del Trabajo a fines de la década de los años 80´ introduciendo las modificaciones que dan nacimiento al ya famoso Decreto Ley 3.500 y que iremos desmenuzando en las siguientes notas.