Teniente Merino Correa: Héroe del Siglo XX
General María Teresa Araya
Jefa de Zona de Carabineros Ñuble
A lo largo de nuestra vida vemos cómo nuestras acciones son guiadas por diversas motivaciones. Ese impulso interno que se convierte en el motor del desarrollo personal y profesional, esa inspiración que nos motiva a ser mejores personas, para el bienestar de la sociedad.
La figura del Teniente Hernán Merino Correa es una motivación para todos nosotros y, por eso, Carabineros de Chile rinde hoy un homenaje a su eterno legado al cumplirse 58 años de su fallecimiento, mientras defendía la soberanía nacional en la zona de Laguna del Desierto.
Nació en Antofagasta, el 17 de julio de 1936. Hijo de Carlos Merino Charpentier, Capitán de Carabineros, y de Ana Correa de la Fuente.
Desde siempre quiso servir al país y a la comunidad, y su inspiradora visión de la vida, lo llevó a los 27 años, a poco de egresar de la Escuela de Carabineros, a protagonizar varios hechos de valentía.
Socorrió a la población de Valdivia en el terremoto de 1960; salvó la vida de una madre y su hijo que cayeron al río Mininco, en la región del Biobío; y en Puerto Aysén, rescató al único sobreviviente de un accidente aéreo, al que cargó sobre sus hombros durante ocho horas hasta conseguir ayuda médica.
A cargo de la Tenencia Cochrane, recorría el pueblo y sus alrededores a caballo para orientar a los vecinos. También, colaboró en la gestión de mejoras en atención de salud, áreas verdes y construcción de caminos.
Justamente en el extremo sur del país, el 6 de noviembre de 1965, daría su última y más grande muestra de valor, patriotismo y determinación. En el marco de un tenso conflicto limítrofe, en el sector de Laguna del Desierto, al acudir en apoyo de su superior, el Mayor Miguel Torres Fernández, el Teniente Merino, con apenas 29 años, recibió un disparo que le provocó la muerte.
El pueblo de Chile salió a las calles para despedirlo y homenajearlo. El Gobierno declaró duelo nacional por tres días; y el entonces Presidente de la República, Eduardo Frei Montalva, participó en la ceremonia fúnebre. Por su parte, el Congreso aprobó una ley que lo ascendió de manera póstuma al grado de General.
Desde entonces varios establecimientos educacionales del país, al igual que calles y espacios públicos llevan su nombre. El Teniente Merino Correa es una fuente de inspiración inagotable para el desarrollo de la misión desplegada por Carabineros y, más todavía, para quienes desempeñan labores en zonas limítrofes, en el marco del resguardo de las fronteras nacionales y del rol de integración nacional.
Tal como lo enfatiza el Manual de Doctrina y Código de Ética de Carabineros, “falleció el oficial de la institución, pero nació el único héroe chileno del Siglo XX. Un hombre que rindió su vida en defensa de la soberanía nacional y que es un ejemplo de entrega, valentía, honor, vocación y amor a su país”.